Kilker ha lanzado sus dos nuevos modelos de patinetes eléctricos con un diseño que combina tecnología, sostenibilidad y materiales de alta calidad. Financiado a través de una campaña de crowdfounding en Kickstarter, el lanzamiento de la marca está enfocado, de forma sostenible, a conseguir un producto con una amplia vida útil.
La empresa ha centrado sus esfuerzos en la creación de un concepto de movilidad que supere los retos que plantea nuestro siglo en términos de contaminación, sostenibilidad, congestión del tráfico, durabilidad y obsolescencia programada para ofrecer un producto de gran competitividad en su categoría.
Así, Kilker ha lanzado dos modelos diferentes. Se trata del Zero, un modelo pensado para entornos urbanos, y Mendi, diseñado para disfrutar en montaña.
Ambos e-scooters están fabricados a mano y disponen de cuadro de acero al carbono, madera de haya, frenos de disco shimano, horquilla aluminio y neumáticos schwalbe de 16”. Sin comprometer el diseño, los componentes del e-scooter garantizan maniobrabilidad, comodidad y seguridad en la conducción.
Según explica la compañía, sus patinetes ofrecen una serie de diferencias respecto a otros ofertados en el mercado. Entre ellas, destacan su fabricación responsable en la Unión Europea, su facilidad de reparación dados los componentes estándar que equipan, su estabilidad con rueda grande y plataforma larga, su seguridad con freno doble de gran diámetro y su comodidad, con manillar ajustable y buena sensación de frenado.
Prestaciones de los e-scooters de Kilker
Tanto el modelo Zero como Mendi cuentan con un motor de potencia máxima de 600W y 35 km de autonomía. Su carga se puede realizar en dos horas y media. Del mismo modo, disponen de ruedas de 16 ”para una conducción suave y freno de disco hidráulico doble Shimano.
Los patinetes pesan 14 kg y pueden soportar 150 kg de peso máximo. Son resistentes al agua y disponen de una estructura de acero al carbono. Por último, cuentan con manillar con altura ajustable, neumáticos antipinchazos y cinco modos de velocidad.
Fuente: anap.pe
