En 1898 se inició la generación eléctrica en Arequipa y en 1905 unos empresarios decidieron unir esfuerzos y forjar una nueva sociedad generadora de energía eléctrica, es así que en 1908 Arequipa se colocó nuevamente como eje cultural y económico del sur peruano, por ello debía estar dotada de un medio de transporte correspondiente a su nivel: Tranvía Eléctrico, pues hasta ese momento existía aquel llamado “tranvía de sangre”, el cual era un coche halado por caballos percherones que transitaba sobre rieles, que hicieron el transporte público entre 1875 y 1913.
Arequipa fue la segunda ciudad del Perú, en tener sistema tranviario. Un residente local, Carlos Espejo y Ureta, aseguró una franquicia en 1908 para la electrificación de las líneas de tranvía de la ciudad. Espejo vendió sus derechos en 1911 a WR Grace Co. de Nueva York, que registró el Tranvía Eléctrico de Arequipa y se coloca una orden grande con la JG Brill Co. de Filadelfia en 1912. El envío incluye 14 coches de pasajeros, llegando inicialmente los de la serie 100-106 que eran modelos «convertibles»: en un clima cálido sus paneles laterales eran retirados y reemplazados por pantallas, en la foto superior se muestra uno de ellos y podrán notar que a diferencia de los que llegamos a viajar muchos de nosotros, tiene abierta la cabina del conductor, asimismo los costados son transparentes, dejando ver a los pasajeros (particularmente a mí me parecen más bonitos que nuestros contemporáneos). Y más tarde en 1913 llegaron los de la serie 300 que tenían ocho ruedas y un diseño inusual con puertas centrales y vestíbulo. Los pasajeros de primera clase se sentaron en la sección cerrada a la derecha, mientras que los pasajeros de segunda clase utilizan el compartimento abierto de la izquierda (ver foto). Y un “coche rociador”, que al parecer era para ir esparciendo agua en la calzada en el trayecto de la línea del tranvía para compactar el polvo (ver última foto).
Para la instalación del tranvía eléctrico, se requirió de una serie de obras urbanas para el mejoramiento de las calles y la colocación del adoquinamiento de basalto, la construcción de nuevas líneas férreas para el paso de los nuevos coches y el mejoramiento del entorno urbano junto a la estación.
Los tranvías de la serie 700 llegaron en 1939, los de la serie 900 llegaron en 1947, estos últimos tenían originalmente 12 ventanas en cada lado. Eran muy largos para las angostas calles de Arequipa, de tal forma que fueron rediseñados, transformando la primera y la última ventanilla en puertas y los terminales, remodelados, el sistema de vía de los coches tuvo que ser reducido y adecuados a las vías (rieles) de Arequipa; fueron los últimos en ser importados. Estos coches no eran nuevos, sino que se importaron usados .
El tranvía eléctrico fue inaugurado el 12 de julio de 1913 y paralizó su servicio la noche del domingo 9 de enero de 1966, después de 53 años de operaciones. El sistema fue declarado oficialmente fuera de servicio al día siguiente. Vale la pena mencionar que los Tranvías Arequipeños fueron los últimos en prestar sus servicios en el Perú, ya que el de Lima fue cerrado en septiembre del año 1965.
